En consulta, veo a muchos papis preocupados por ofrecer una alimentación saludable a sus peques y yo siempre les hago la misma pregunta: ¿Cómo es tu alimentación? ¿Y la del resto de personas de la familia?
Muchas veces nos centramos en ofrecer alimentos saludables a nuestros hijos sin preocuparnos por lo que comemos nosotros. Esto es un grave error, pues como hemos hablado muchas veces, los peques aprenden por imitación y nosotros, su familia, somos sus principales referentes.
El núcleo familiar es nuestra principal referencia de educación, cultura, hábitos, valores y salud durante la infancia, que es la etapa en la que se crean los hábitos que, probablemente, mantendremos a lo largo de toda nuestra vida.
Además, no solo el peque se beneficiará de unos hábitos saludables, sino que son clave para el bienestar de toda la familia. Por ello, en este artículo compartiremos estrategias prácticas para fomentar una nutrición saludable en familia, desde la planificación de comidas hasta la creación de un entorno favorable para tomar decisiones acertadas.
Planificación de comidas y lista de la compra:
Es interesante planificar las comidas principales, así como almuerzos y meriendas, con antelación. De esta forma nos aseguramos contar con los ingredientes o alimentos necesarios para preparar estas comidas, sin tener que recurrir a productos preparados o precocinados que, generalmente, no serán tan interesantes a nivel nutricional.
Para que esto funcione, es igual de importante planificar la compra de forma adecuada y preparar una lista de la compra.
Es importante no olvidarnos de incluir a los más peques en este primer paso: ¿qué fruta te apetecería que comprase? ¿Me acompañas a comprar a la verdulería?... ¡Unos buenos hábitos de alimentación empiezan en la cesta de la compra!
Compartir las comidas en familia (sin pantallas ni distracciones):
Debemos asegurarnos de que las comidas sean un entorno agradable para toda la familia. Aprovechemos para convivir, dejemos las pantallas y las distracciones de lado y compartamos con los demás.
Recuerda que no es beneficioso para nadie que las comidas se conviertan en un momento de peleas, de obligación o de castigo, esto solo hará que el peque tenga rechazo a este momento. Aprovecha para conectar con él y ser su ejemplo.
Educación alimentaria:
Nosotros tenemos muy claros los diferentes grupos de alimentos que existen y la importancia de llevar una alimentación variada y equilibrada, pero nuestros peques no y es nuestro deber educarles también en este aspecto.
Para facilitar este aprendizaje, os dejamos por aquí un recurso súper útil y divertido: ¡algunos cuentos infantiles que podéis leer en familia!
- ¡PUAAAAJ!, de Melisa Gómez y Juan Llorca
- Tina disfruta comiendo, de Conchi García
- ¡Vamos al mercado!, de Conchi García
- Sanotes, sanitos, de Blanca García-Orea
¿Cómo puedo ayudaros?
Como nutricionista, mi labor va mucho más allá de hacer dietas personalizadas individuales. Como familia, puedo ayudaros a planificar vuestra alimentación para que sea saludable para todos los miembros, desde el mayor hasta el más pequeño. Mediante la educación alimentaria, aprenderéis estrategias que sirvan también para los mas peques, haciendo que la nutrición sea algo divertido y educativo. También os daré ideas de recetas sabrosas y saludables que podáis disfrutar todos juntos.
En resumen, promover una nutrición saludable en familia es una inversión a largo plazo en la salud y el bienestar de todos los miembros. Al implementar estrategias como la planificación de comidas, compartir comidas en familia y aprender juntos acerca de nutrición y alimentación, estarás sentando las bases para hábitos alimentarios saludables que perdurarán para toda la vida.
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